miércoles, 30 de noviembre de 2011

El límite soy yo

Un día todos los empleados llegaron a la oficina y vieron un gran cartel en la puerta donde estaba escrito:

"Ayer la persona que estaba obstaculizando tu crecimiento en esta compañía falleció. Te invitamos al funeral que ha sido preparado en el gimnasio".

Al comienzo, todos se sintieron mal por la muerte de uno de sus colegas, pero después de un rato les picó curiosidad por saber quién era la persona que obstaculizaba el crecimiento de sus colegas y de la compañía misma.

Era tanto el alboroto en el gimnasio que se les pidió a los guardias de seguridad que controlaran a la multitud.

Cuanta más gente se aproximaba al ataúd, más intenso se hacía el alboroto. Todos pensaron: "¿Quién es el tipo que estaba impidiendo mi progreso? Bueno, ¡por lo menos se murió!".

Uno por uno los conmovidos empleados se aproximaban al ataúd y cuando miraban dentro súbitamente se quedaban sin palabras.

Parados cerca del féretro, conmocionados y en silencio, parecería que alguien les hubiera tocado la parte más profunda de su alma. Había un espejo dentro del ataúd: todos los que miraban dentro se podían ver a sí mismos.

Había también un cartel al lado del espejo que decía:
"Hay una sola persona que es capaz de ponerle límites a tu crecimiento: Tú mismo/a.

Tú eres la única persona que puede revolucionar tu vida. Tú eres la única persona que puede influenciar tu felicidad, tu realización y tu éxito. Tú eres la única persona que se pueda ayudar a sí misma.

Tu vida no cambia cuando cambia tu jefe, cuando cambian tus amigos, cuando cambian tus padres, cuando cambian tus socios, cuando cambia tu compañía.

Tu vida cambia cuando TÚ cambias, cuando vas más allá de tus creencias limitantes, cuando te das cuenta que eres la única responsable de tu vida.

Examínate, obsérvate.

No tengas miedo de las dificultades, imposibilidades y pérdidas: sé un ganador, constrúyete a ti misma/o y tu realidad.

El mundo es como un espejo: devuelve los reflejos de los pensamientos en los cuales uno ha creído fuertemente.

El mundo y su realidad son como espejos yaciendo en un féretro, los cuales muestran a cualquier persona la muerte de su divina capacidad de imaginar y crear su felicidad y éxito.

Es la forma en la cual enfrentas a la Vida lo que hace la diferencia."

Anónimo